Quizá este artículo nos ayude a comprender:
Algunos conceptos copiados del artículo, pero os recomiendo la lectura completa porque va mucho más allá.
——-
Los principales factores que afectan a la degradación de una batería de iones de litio son los ciclos de carga, la potencia de carga/descarga, los límites/profundidad de carga/descarga y la exposición a altas temperaturas .
Como regla general, las baterías suelen tener una garantía de 8 años o 160.000 kilómetros (lo que ocurra antes) con un SoH mínimo del 70% (es decir, que la batería mantenga un 70% de su capacidad original).
La degradación de una batería suele ser más acusada al principio, pero se va estabilizando con el paso del tiempo.
El principal parámetro que influye en la vida útil de una batería son los conocidos como ciclos de carga . Que una batería haya cumplido un ciclo de carga significa que ha suministrado tanta energía como capacidad total dispone.
Sin embargo, es importante saber que no todos los ciclos son iguales ni afectan de la misma manera a la degradación de la batería .
Aquí es importante resaltar es que contar con una batería de gran capacidad contribuye a que su degradación sea más lenta . A mayor capacidad, menores ciclos tendrá que realizar para entregar la misma cantidad de energía. Es decir, menores ciclos tendrá que realizar para recorrer la misma cantidad de kilómetros.
Las baterías se encuentran más cómodas en la parte intermedia de su capacidad de carga, más o menos entre el 30% y el 80%, y mantenerlas dentro de esos límites combate la degradación.
Por lo tanto, para alargar la vida útil de la batería lo recomendable es evitar descargas profundas (0%) o cargas totales (100%) en la medida de lo posible.
Las baterías trabajan mejor a temperaturas templadas, de entre unos 15 y 35 grados .
Concretamente, las altas temperaturas son el peor enemigo de las baterías de litio y las principales causantes de una degradación prematura. La bajas temperaturas, en cambio, disminuyen el rendimiento de forma momentánea (hay una pérdida de autonomía), pero este se recupera una vez que la temperatura vuelve a valores templados.
El flujo de potencia que entra o sale de la batería es también un factor importante de cara a su degradación.
Por eso los fabricantes suelen recomendar la recarga lenta como recarga habitual y la rápida solo cuando sea necesario.
Directamente ligado con el punto anterior, utilizar puntos de recarga rápida o hacer una conducción deportiva también van a provocar un mayor calentamiento en la batería del coche . Al final, cuanto mayor flujo de potencia entre o salga de la batería (sea por pisar el acelerador o por realizar cargas rápidas), mayor será el calentamiento […].